sábado, 26 de abril de 2014

TURQUIA I - PAMUKKALE

PAMUKKALE


Al sudoeste de Turquía, concretamente en el valle del río Menderes, en la provincia de Denizli, donde se disfruta de un clima templado la mayor parte del año, se encuentra Pamukkale, ("castillo de algodón" en turco), una zona natural, que es al mismo tiempo una famosa atracción turística.




Junto con Hierápolis, Pamukkale, está declarado Patrimonio de la Humanidad desde 1988. Sólo unos pocos lugares en el mundo se le parecen, como las fuentes termales de Mammoth, en el Parque Nacional de Yellowstone, en los Estados Unidos, y Egerszalók en la Hungría, y Huanglong en la provincia china de Sichuan, (otro lugar declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco).



Los movimientos tectónicos que tuvieron lugar en la depresión de la falla de la cuenca del río Menderes no sólo causaron frecuentes terremotos sino que también ocasionaron la aparición de numerosas fuentes de aguas termales. Fueron esas aguas, con su alto contenido en minerales — creta en particular — las que crearon Pamukkale.




Además de algún material radioactivo, el agua contiene grandes cantidades de bicarbonatos y calcio que producen la precipitación de bicarbonato de calcio. Cada segundo brotan de estas fuentes 250 L de agua, dando lugar a la precipitación de 2,2 g de creta por cada litro de agua o 0,55 kg de creta por segundo. Con el paso del tiempo algunas fuentes se secaron debido a los terremotos, mientras que otras nuevas surgieron en los alrededores.

Este fenómeno natural produce gruesas capas blancas de piedra caliza y travertino que bajan en forma de cascadas por la ladera de la montaña, lo que da la sensación de estar ante una catarata congelada. Estas formaciones también adquieren el aspecto de terrazas de travertino en forma de medialuna que contienen una capa de agua poco profunda dispuestas en el tercio superior de la ladera formando escalones, que oscilan de 1 a 6 metros de altura, o estalactitas que sostienen y unen estas terrazas.


Entre las rocas más antiguas se pueden encontrar mármoles cristalinos, cuarcitas y esquistos, que datan del periodo del Plioceno, mientras que la capa superior es de la era Cuaternaria. Los depósitos más recientes de carbonato de calcio le dan al lugar un aspecto blanco deslumbrante.
Las puesta de sol desde la zona son espectaculares, con los volcanes próximos como telón de fondo.



 Estas fuentes, muy conocidas en la antigüedad, fueron descritas por el arquitecto romano Vitruvio. Los griegos frigios atribuyeron a sus aguas propiedades terapéuticas, otorgadas por los dioses, especialmente Asclepio (semidios de la medicina) y su hija Hygieia (diosa de la salud, la higiene y la sanación), bajo la protección de Apolo (dios de la medicina y la curación).
Se pueden tomar baños termales en cualquiera de los hoteles que hay en la zona.


HIERAPOLIS

La antigua ciudad de Hierápolis se construyó en lo alto del ‘castillo’ blanco, que en total tiene 2700 m de longitud y 160 m de altura. Puede ser divisado a gran distancia, por ejemplo, si vamos conduciendo por las colinas del lado opuesto del valle hacia la ciudad de Denizli, que está a 20 km, o viajando desde la costa de Antalya y el mar Egeo.




 La ciudad fue establecida por Eumenes II, rey de Pérgamo, alrededor de 180 a. C. Colapsó luego de un terremoto durante el reinado de Tiberio en el año 17. La ciudad fue reconstruida, y tuvo significativas transformaciones en los siglos II y III que le hicieron perder todo su antiguo carácter helenístico para convertirse en una urbe típicamente romana. En ese período, se convirtió en importante centro de descanso veraniego para los nobles de todo el Imperio, que acudían a ella atraídos por las aguas termales. Posteriormente bajo dominio bizantino, cayó en poder de los selyúcidas en 1210 bajo Giyasettin Keyhusrev. Fue destruida completamente por un terremoto en 1354.




Construido en el siglo II, se compone de tres secciones: Cávea, Scena, y Orchestra. Edificado sobre una pendiente, la cávea aún conserva sus formas, que revelan que el teatro tenía capacidad para entre 15 y 20 mil espectadores. Las partes superiores de la scena, que mostraban escenas mitológicas grabadas en mármol, se han derrumbado; tenía cinco grandes puertas esculpidas en mármol, tres en el centro y una a cada lado. Esta en muy buen estado de conservación, preservando gran parte del graderio de y la escena.









La ciudad preserva las ruinas de sus baños, fuentes monumentales, el ágora, puertas de entrada en las calles principales, etc.. aunque no esta tan conservada como en otros sitios la cuadricula clásica de las ciudades. romanas.
También podemos contemplar los restos de un edificio octogonal del siglo V construido en memoria del apóstol Felipe y lo denominan en Martirio de San Felipe ( ¿octogonal como las iglesias templarías ?).



 La actividad volcánica subterránea que causa las fuentes termales también causó que se filtrara dióxido de carbono en una cueva de Hierápolis a la que se llamó cueva de Plutón. Fue bautizada con ese nombre porque la gente que entraba allí moría a causa del gas y se pensaba que era Plutón, dios de los infiernos, el que enviaba ese gas. Es otra de las Puertas del Averno para los romanos ( ver entrada de Pozzioli en Napoles ).




 La ciudad alberga tres necrópolis, al sudoeste, al norte y al este, que es lo más impresionante del sitio arqueológico, junto con el teatro.



Se pueden vistar cientos ( ¿miles? ) de tumbas de diferentes períodos y formas: desde simples nichos excavados en el suelo, a sarcófagos de piedra tallados con más o menos arte, hasta grandes tumbas en forma de túmulo con entradas monumentales.